Acto 1.
Prólogo.
La princesa Odette está paseando por la orilla del lago. Se encuentra con un extraño misterioso que la asusta. Rothbart, cautivado por la belleza de Odette, le pide su mano y su corazón, pero la princesa lo rechaza. Enfurecido, Rothbart convierte a Odette en un hermoso cisne blanco. Ahora, el único que puede salvarla es aquel que se enamore de ella, jure fidelidad y mantenga esa promesa.
Escena 1.
Día de primavera. En el parque del antiguo castillo real, el príncipe Siegfried celebra su mayoría de edad. Las jóvenes de la corte del príncipe buscan su atención, pero él no tiene prisa por comprometerse en matrimonio. Elegantes danzas de caballeros y damas son seguidas por las divertidas actuaciones del Bufón. Aparece la princesa madre de Siegfried, acompañada por su séquito. Felicita al príncipe por su madurez y le regala una ballesta. Siegfried está encantado con el obsequio. La princesa madre se retira con su séquito. La fiesta continúa, pero el príncipe se aburre y pide a todos que se vayan. Siegfried se dirige al lago para cazar.
Escena 2.
El príncipe está en la orilla de un hermoso lago. El malvado hechicero Rothbart lo observa. Una bandada de cisnes llega al lago para nadar. Siegfried se sorprende al ver que los cisnes se transforman en chicas. La reina de los cisnes, Odette, le cuenta al príncipe que ella y sus amigas son víctimas de la hechicería del malvado mago Rothbart, quien las convirtió en cisnes. Solo por la noche, junto a este lago, pueden asumir forma humana. El terrible hechizo continuará hasta que un hombre que nunca ha jurado amor a ninguna chica ame a Odette para siempre. Siegfried le jura amor eterno y fidelidad a Odette. Pero el malvado hechicero lo ha visto todo y ya está elaborando un plan astuto para separar a los dos amantes. Está amaneciendo. Odette se despide de su amado. La bandada de cisnes se aleja.
Acto 2.
Escena 3.
En el castillo de la princesa madre se celebra un gran baile en honor al cumpleaños del príncipe. En este baile, por voluntad de su madre, Siegfried debe finalmente elegir a su novia. Aparecen los invitados, y las novias se muestran al príncipe. La madre le pide a Siegfried que elija. Él duda. De repente, aparece un caballero desconocido con su hermosa hija Odile. Odile, subrayando en todo momento su parecido con la chica cisne, seduce al príncipe. Siegfried hace su elección; convencido de que Odette y Odile son la misma persona, declara a la hija de Rothbart como su novia y le jura amor eterno. Rothbart y Odile se ríen de él. Un cisne blanco bate sus alas en la ventana del castillo. Siegfried se da cuenta de su error fatal. Desesperado, corre hacia el lago de los cisnes.
Escena 4.
Orilla del lago. Las chicas cisne esperan ansiosamente el regreso de Odette. En desesperación, ella les cuenta sobre la traición de Siegfried. El malvado hechicero ha triunfado, y ahora las chicas no tienen salvación. Comienza una tormenta en el lago. El príncipe llega a la orilla, suplicando a Odette que lo perdone. El malvado hechicero desata las fuerzas de la naturaleza contra Odette y Siegfried. Pero los dos amantes no temen ni al trueno ni al rayo, y la tormenta no los asusta. El príncipe lucha con el guardián del lago y lo derrota.
Epílogo.
Los malos hechizos ya no tienen poder sobre Odette. El cisne se convierte en una hermosa princesa y, junto con Siegfried, saluda con alegría los primeros rayos del sol naciente.